La diputada María Leonor Noyola Cervantes (PVEM) propuso reformar la Ley Federal del Trabajo para que las personas trabajadoras que sean cuidadoras primarias de personas con discapacidad permanente o en situación de dependencia funcional severa, tengan derecho a solicitar licencias laborales especiales con goce de sueldo parcial o total.

La idea es que la duración y renovación de estas licencias estarán sujetos a la acreditación de la condición de discapacidad, mediante certificación médica expedida por una institución de salud pública y al cumplimiento de los requisitos establecidos por las autoridades competentes.

Implementar las licencias laborales especiales, explicó, es un acto de justicia social y de buenas prácticas de política pública, mejora la productividad, disminuye el ausentismo no planificado y reduce la rotación laboral. Se fundamenta en principios de derechos humanos, equidad laboral, perspectiva de género y protección social.

Refirió que más del 16 por ciento de la población en México vive con algún tipo de discapacidad, que en muchos casos requieren atención, tratamientos médicos y cuidados continuos que superan las condiciones que ofrecen la mayoría de los y las trabajadoras en el marco del régimen laboral tradicional.

Expuso que en el marco legal actual existen barreras que impiden la participación plena de las personas con discapacidad en el ámbito laboral y no aseguran el bienestar de quienes asumen la responsabilidad de cuidarles, lo que constituye una limitación para este grupo vulnerable.

Adicionalmente, en México el cuidado de personas con discapacidad recae en gran medida sobre las mujeres, que se ven obligadas a elegir entre su empleo y las necesidades del cuidado, lo que se traduce en una vulnerabilidad económica, pues la falta de protección laboral genera pérdidas en ingresos y, en algunos casos, del empleo, perpetuando la desigualdad de género.

Advirtió que no reconocer el derecho de las personas con discapacidad y sus cuidadores a las licencias laborales para atender necesidades relacionadas con su condición, genera una situación de vulnerabilidad, pues se ven obligados a elegir entre su empleo y atender urgencias que podrían afectar su salud y bienestar.

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