Más de la mitad (64 por ciento) dice que su trabajo influye en su salud mental, sólo ligeramente por encima de la media mundial del 60 por ciento, de acuerdo con la última investigación Salud Mental en el Trabajo: Líderes y Dinero, realizado por The Workforce Institute en UKG.

A nivel personal, el 62 por ciento siente que su trabajo ha impactado negativamente su relacionamiento con otras personas, además de que el 60 por ciento percibe que su trabajo ha afectado en su salud y bienestar en general. Los principales aspectos son: no tener suficiente tiempo para relajarse (32 por ciento), no tener suficiente tiempo para pasar con la familia y los amigos (36 por ciento), y el impacto negativo sobre el sueño (30 por ciento).

Las cifras del estudio muestran la situación actual del mercado laboral mexicano, donde los empleados se sienten saturados pero suelen anteponer su responsabilidad y necesidad, dejando en segundo término su salud mental, la cual tiene un impacto directo y trascendental en su desempeño, tanto en la empresa como en su vida personal.

El ritmo de trabajo puede ser un factor importante, ya que a una cuarta parte de los mexicanos (24 por ciento) les cuesta comenzar su día laboral, mientras que 21 por ciento sienten que tienen una carga de trabajo excesiva, lo que afecta su rendimiento y productividad. Sin embargo, es el país en donde los empleados se presionan más a sí mismos (35 por ciento), siendo la principal causa de estrés laboral.

Al respecto, Tatiana Treviño, Gerente de Comunicación Estratégica en UKG, firma especializada en servicios de administración de personal y administración de recursos humanos, considera: “Es evidente la importancia que existe en la comunicación entre empleado-empleador. Si bien, el estrés laboral es un factor que influye y repercute en otros aspectos de nuestra vida, debemos alzar la voz y hablar con nuestros jefes sobre nuestro bienestar y buscar alternativas que ayuden a aligerar la carga de trabajo”.

Otros hallazgos del estudio radican en que más de un tercio (38 por ciento) de los colaboradores de México afirma que el estrés laboral ha causado dificultad para concentrarse — siendo el porcentaje más alto en todo el mundo. Posiblemente a causa de que el 17 por ciento de ellos se sientan en un estado de burnout y donde el 24 por ciento afirma que el estrés relacionado con el trabajo disminuye su productividad y rendimiento además de que el 19 por ciento se siente cortante, irritable y menos amistoso con sus compañeros de trabajo.

Respecto a la importancia que le dan los mexicanos a su bienestar mental, el sondeo de UKG revela que, la vasta mayoría (82 por ciento) prefiere tener una buena salud mental que un trabajo bien pagado, mientras casi la mitad (43 por ciento) aceptaría una reducción de salario por un empleo que apoye más su estabilidad emocional

También vemos una importante conexión entre el estrés por carga de trabajo y la salud mental con la comunicación del equipo de liderazgo. Cerca de un cuarto de los empleados (23 por ciento) no sienten tener un buen balance de vida y empleo, así como el 20 por ciento que opina no tener un buen bienestar mental, nunca habla con su jefe sobre su carga de trabajo.

Dentro de las razones principales por las cuales no alzan la voz, vemos la percepción de que su jefe está demasiado ocupado para hacer tiempo de hablar con ellos (22 por ciento) y que creen que deben poder resolverlo ellos mismos (17 por ciento). Por otro lado, el 36 por ciento que considera tener un buen equilibrio y 39 por ciento que considera tener una excelente salud mental, habla con su líder sobre su carga de trabajo cada semana.

En este contexto, UKG recomienda crear conciencia de cómo podemos trabajar en nuestro bienestar, que va desde alzar la voz con los jefes, hasta buscar ayuda de un especialista. 

Adicionalmente, es importante que las empresas apoyen el bienestar físico y mental de los colaboradores y lo muestren ofreciendo programas o recursos que lo fomenten, como tiempo libre remunerado, cursos, materiales educativos, grupos de apoyo, entre otros, ya que 52 por ciento de los encuestados mencionaron no tener ningún apoyo de este tipo en su trabajo.

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