Ante reformas laborales como la del aguinaldo digno que pretende incrementar esta prestación de 15 a 30 días de salario, y cuya propuesta se encuentra en proceso de aprobación en el Senado, las empresas deben blindar sus presupuestos, estimó Gloria Guerrero Muñiz, Gerente de División Adecco Training & Consulting.

Al presentar el Panorama de las tendencias salariales, elaborado por la organización de Recursos Humanos, señaló que si bien no todas las estrategias deben estar basadas sólo en el salario, sí deben verse de forma integral para enfrentar los impactos en sus presupuestos.

“Hay variables orientadas al puesto que impactan económicamente, como comisiones, bonos, elementos que pueden ayudar, dependiendo de la estrategia de la empresa. Para ayudarles, hay que diagnosticarlos para enfrentar este impacto”, añadió la experta.

En este sentido, el reporte refuerza que las empresas tendrán que innovar en la oferta de prestaciones que sean realmente valoradas por los trabajadores como Home Office, días personales, flexibilidad, con la intención de ser competitivas.

Los diferenciales en prestaciones superiores a la ley serían: vales de despensa, fondo de ahorro, comedor, seguro de vida, gastos médicos mayores y menores, transporte o ayuda de transporte.

Y es que, de acuerdo con el estudio, las empresas tienen que presupuestar la diferencia de los 15 días en caso de ser aprobada la reforma referida. Además, es un incremento adicional que se debe considerar junto con el salario mínimo y la prima vacacional con 12 días. (de Ley 12 días y 25 por ciento de prima vacacional).

Para abundar en estrategias para fidelizar al talento, Guerrero Ortiz destacó entre otras, cambiar el conocido bono de puntualidad por el de asistencia, y orientarlo más hacia la durabilidad: A partir de tres meses, que el colaborador se motive a mantenerse otro lapso igual, por ejemplo.

En este punto, el salario emocional también juega un impacto relevante dada la importancia de gestionar el estrés, las cargas de trabajo, días de descanso, alternativas que no se monetizan, pero que implican un beneficio emocional que se ve reflejado en días flexibles, por ejemplo.

Respecto a la propuesta de la presidenta electa de llevar el salario mínimo a un incremento anual de 11 por ciento en los próximos seis años, llevando a 465.6 pesos diarios (13,968 pesos), el estudio recomienda que las empresas soporten esas alzas año con año, sin disminuir personal o que impacte en otros niveles dentro de la empresa.

No obstante, el impacto es mayor en pequeñas y medianas empresas, las cuales pueden recurrir a la informalidad del trabajo, por lo que llamó a mantener la equidad salarial interna para que todos los niveles de la empresa sean beneficiados.

Una de las reflexiones centrales de la investigación de Adecco es que el incremento del sueldo mínimo no influye de igual manera a todas las organizaciones pues depende del tamaño, la industria, la capacidad de ahorro de la empresa, así como las características de los empleados.

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