Durante la inauguración de la Unidad Integral de Género de la Facultad de Ingeniería, la directora de Gestión Comunitaria y Erradicación de las Violencias de la Coordinación para la Igualdad de Género (CIGU) de la UNAM, Karla Amozurrutia Nava enfatizó la importancia de que las dependencias y entidades de la Universidad se sumen al trabajo de articulación para la construcción de la igualdad sustantiva.

En su oportunidad, la titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios de la UNAM, Guadalupe Barrena Nájera, informó que se contará con el apoyo de un equipo de especialistas de la instancia a su cargo, integrado por abogados, psicólogos y trabajadores sociales, quienes atenderán las inquietudes del alumnado, así como del personal académico y administrativo.

A su vez, el director de la FI, José Antonio Hernández Espriú, manifestó: la igualdad es una condición necesaria para resarcir el tejido social, ampliar oportunidades, pero, sobre todo, es parte de un cambio de mentalidad importante que habrá que fortalecer para lograr una convivencia enmarcada en los valores universitarios.

Amozurrutia Nava -quien asistió en representación de la titular de la CIGU, Tamara Martínez Ruíz- destacó que el estudiantado es parte activa en el trabajo por la igualdad de género y en esta Universidad, en donde la formación se asume desde un sentido crítico frente a la realidad social, se espera que la comunidad estudiantil accione frente a sus contextos.

“Las colectivas de mujeres y disidencias sexo genéricas son parte del motor que ha llevado a la Universidad a transformarse, por lo cual es importante y fundamental tener una escucha activa ante todas sus voces y trabajar codo a codo”.

La UNAM, prosiguió, sigue cambiando en concordancia con las necesidades del contexto nacional, donde se forman profesionistas técnicos y actores sociales con un perfil integral que impacta positivamente a la sociedad mexicana.

Más adelante, Hernández Espriú puntualizó que la comunidad enfrenta diversas desigualdades que es importante reconocer y, a partir de ello, refrendar el indeclinable compromiso con la igualdad de género y los derechos humanos.

Con esta inauguración se ha dado un primer paso, de otros sustanciales que nos falta dar relacionados con la transversalización de la perspectiva de género; erradicación de las violencias; armonización de las políticas de igualdad; capacitación; atención de quejas a cargo de personas especializadas; paridad de oportunidades y otras acciones que se requieren para dar un giro a esta Facultad marcadamente masculinizada, subrayó su director.

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